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¿Cómo se entrena a un perro rescatista?
Sus propios instintos y características hacen de los perros un gran aliado para la búsqueda y rescate de personas en situaciones de peligro o catástrofes. Aunque algunas razas presentan mejores condiciones para tales objetivos, por su condición de mascota, siempre harán lo posible por brindar protección.
Ya sea para buscar personas perdidas o para encontrar sobrevivientes debajo de escombros, el éxito que lleguen a tener los perros rescatistas salvando gente es gracias al buen entrenamiento y la relación que tengan con su instructor. Aquí te contamos más acerca de esta práctica que ha ayudado en varias circunstancias a la humanidad.
Origen de los perros de rescate
Aunque se dice que desde épocas previas los perros ya contaban con ciertas instrucciones para apoyos de rescate, hay que mencionar que la primera escuela en forma la desarrollaron los suizos, pues comenzaron a instruir a sus perros para rescate y salvamento (SAR por sus siglas en inglés) durante catástrofes de avalanchas de nieve en las montañas, para así establecer el Método Suizo a partir de 1972.
A partir de la Segunda Guerra Mundial, el Pastor Alemán se ubicó como un gran compañero para encontrar y ayudar a rescatar a personas de los escombros ante la destrucción causada tras las batallas.
Hacer de la búsqueda un juego
Los perros de búsqueda y rescate están entrenados para diferentes propósitos, por ejemplo, los perros rastreadores siguen el camino que ha tomado una persona, mientras que, para la situación de una catástrofe donde no se busca a una persona en particular sino la existencia de cualquier persona bajo escombros, los perros buscan partículas de olor humano en un área específica. Incluso algunos han trabajado desde barcos ayudando a localizar restos humanos debajo del agua.
Los perros están entrenados para que su trabajo lo perciban como un juego, con recompensas incluidas. Según los entrenadores, en “el juego” de la detección humana siempre es bueno que los perros reciban un adecuado reconocimiento, y en el caso de que no hayan encontrado a nadie, es recomendable que alguien se haga pasar por perdido para que el perro lo encuentre y así seguir fomentando su participación.
El entrenamiento de un perro de rescate debe ser constante, ya que tienen que mantenerse activos y en forma para poder intervenir en caso de presentarse algún infortunio. Durante el entrenamiento, también es bueno enfrentar al perro a situaciones nuevas, con la idea de que esté siempre preparado para cualquier situación, tanto física como mentalmente.
Frida y otros perros de rescate en México
México ha vivido dos grandes terremotos en su historia y durante el más reciente del 19 de septiembre de 2017, los perros de rescate jugaron un papel de gran trascendencia para ubicar personas que quedaron atrapadas en los restos de edificaciones caídas. En este caso, la más famosa es la perra Frida, una Labrador que fue protagonista de los medios de comunicación por su labor exitosa en las acciones de rescate.
La Sección Canina del Cuartel General del Alto Mando de la Secretaría de Marina cuenta con un aproximado de 300 perros de rescate, incluyendo a Frida y, por ejemplo, a Ecko y Evil, dos hermanos Pastor Alemán que también destacaron por su colaboración durante la tragedia de 2017. Además de ellos, otros dos nombres (también de raza Pastor Alemán) apoyaron a la causa en gran medida: Chichí, un perro que junto a su entrenador fungían como rescatistas independientes (lamentablemente el perro murió en 2019), y Geri, integrante de la Unidad Canina de Búsqueda y Rescate de la UNAM.
En 2019 y con la edad de 10 años y 2 meses, Frida fue jubilada con honores sumando más de 50 personas rescatadas durante sus años de servicio, para ahora pasar sus días como una mascota, con los cuidados de casa necesarios y el amor de una familia. Aunque fue necesario que la perrita de rescate más famosa de México pasara por una transición gradual para adaptarse a su nueva vida, desde una nueva alimentación hasta el “desacondicionamiento” para dejar de hacer la rutina de un perro de rescate, es decir, finalizar por completo con su entrenamiento.
Si estás interesado en que tu perro obtenga conocimientos de un perro de rescate, puedes acercarte a una escuela especializada en este tipo de entrenamiento, tal vez tu mascota no se ponga al servicio de la comunidad, pero sí puede ser algo positivo que pueda agudizar sus capacidades innatas de búsqueda y rescate, pues podrían ser de gran ayuda ante cualquier incidente no previsto en casa.
En Purina creemos que cuando las personas y las mascotas se unen la vida es mejor.
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