Considera lo siguiente cuando vayas a la playa con perros

Conoce lo que debes saber antes de viajar con mascotas. Cuídalas bien mientras comparten momentos únicos para que así la diversión sea una realidad.

Viajar con mascotas es una aventura cargada de diversión y emoción, tanto para tu amigo de cuatro patas como para ti. Aun así, también es una responsabilidad muy importante; por eso, aprende qué hacer antes y durante el trayecto para que todo salga bien.

Viajar con mascotas: antes del gran momento

Asegúrate de que tu mascota tiene toda su documentación en regla y las vacunas al día. Si viajas al extranjero, deberás informar de ello a tu veterinario para que te explique si necesita alguna vacuna adicional.

Antes de emprender la marcha, es clave que tu perro tenga su propia “mochila de viaje” con los elementos esenciales para su bienestar y comodidad durante la travesía, entre los que están:

1. Su cartilla de vacunas actualizada en caso de que se produzca algún imprevisto.
2. Su correa y su collar con placa de identificación.
3. Un recipiente o bebedero y abundante agua fresca.
4. Bolsas para recoger sus excrementos.
5. Un juguete para hacerlo sentir cómodo
6. Algún snack para premiarlo cuando responda a estímulos positivos.

Otra aspecto a tener en cuenta es la duración del viaje: si tu perro es muy nervioso o no está acostumbrado a trayectos largos, considera que el veterinario (no nosotros por iniciativa propia) le recete algún tranquilizante.

Una vez que decidas a qué destino irán, dedica un tiempo para planificar lo que tu perro va a necesitar. Si la idea es, por ejemplo, compartir unos días de verano en una playa, no olvides meter en su mochila (además de lo esencial) lo siguiente:

1. Una sombrilla para que tu perro esté protegido de los rayos solares, en especial en las horas de mayor exposición al sol.
2. Fundas para proteger las almohadillas de sus patas, en el caso de que tu perro muestre hipersensibilidad al contacto con la arena caliente.
3. Algún juguete para el agua o la playa, tipo frisbee o pelota. Eso lo mantendrá activo y te dará la oportunidad de jugar con él.

Por otro lado, si es un destino frío, piensa en su bienestar manteniéndolo abrigado y llevando ciertos elementos que ayudarán a que la experiencia sea perfecta y gratificante para ambos.

1. Las fundas para proteger sus almohadillas
2. Algún tipo de abrigo
3. Su cobija, tapete o colchón (si los tiene)

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Viajar con mascotas es la mejor experiencia para ambos, donde lo más importante es que se diviertan y pasen un increíble momento juntos; por ello, asegúrate de que tiene toda su documentación en regla y las vacunas al día.

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Si viajas al extranjero, infórmaselo a tu veterinario, para que te explique si tu mascota necesita alguna vacuna adicional. Además, si tu perro es muy nervioso o no está acostumbrado a trayectos largos, este profesional le puede recetar algún tranquilizante.

Elige un lugar adecuado

Actualmente, existen diversos alojamientos “pet friendly” en donde tu perro se sentirá tan bien atendido como tú. Contáctalos y explícales las características y personalidad de tu mascota, ellos te darán información sobre lugares cercanos y actividades para que las disfruten juntos.

Viajar con mascotas: llegó el momento

Una vez que tus planes estén listos y que sea el momento de partir, también es clave que no olvides seguir cuidando a tu compañero de cuatro patas; por este motivo, considera lo que ahora empieza y no puedes ignorar.

Viajar con mascotas en auto

El auto es el mejor aliado para compartir nuevas experiencias con tu amigo de cuatro patas. Es ideal por el nivel de control y autonomía que te permite, además de ser seguro y cómodo para tu perro.

Sin embargo, viajar con mascotas en coche es también una responsabilidad. Por eso, si decides hacerlo, es tu deber informarte previamente de las mejores opciones de desplazamiento y conocer lo que dictamina el código de circulación y tránsito.

En estos casos, lo más recomendable es utilizar una caja transportadora. Colócala en el suelo, detrás de los asientos delanteros o sobre ellos, bien sujeta. Haz una parada cada 2 o 3 horas, para que tu perro beba agua y camine.

Así mismo, nunca lo dejes encerrado dentro del auto, especialmente en un lugar donde haga mucho calor y, contrario a la creencia, evita que asome la cabeza por la ventanilla, pues su nariz y sus ojos pueden sufrir consecuencias.

Consejos para un viaje cómodo y limpio

No olvides que no es igual viajar con un perro de raza pequeña que hacerlo con uno de mayor tamaño. Sea cual sea el medio de transporte, evita darle de comer antes del viaje para que no vomite. La mayoría de los canes suele marearse durante el trayecto. Además, recuerda lo siguiente:

• Cepilla a tu perro un día antes de iniciar el trayecto. De esta manera, eliminarás el exceso de pelo muerto y su acumulación en tu vehículo.
• Nunca lo dejes solo dentro del auto. Las altas temperaturas son un riesgo para su salud. Mantenlo fresco con el aire acondicionado durante el viaje, sólo asegúrate de que no le dé directamente.
• El exceso de ruido también puede afectar a su comodidad.

Con esto en mente, ten en cuenta que, si tu perro es pequeño, lo ideal es que viaje en una caja de transporte rígida lo suficientemente amplia para que pueda estirarse, si lo desea. Ésta deberá ir encajada, idealmente, en el lado derecho y en el suelo del asiento trasero.

La razón por la que se recomienda ubicarlo así responde a la lógica de maniobra: el lado derecho es el más próximo a la acera, por lo que el acceso a la caja de transporte o a tu mascota, será fácil y seguro.

Ahora, si tu mejor amigo es un perro de raza grande, puedes optar por estas dos opciones:

Sentado en el asiento trasero

Con un arnés de doble anclaje (nunca simple), que debe ir sujeto a los enganches de los cinturones de seguridad. Busca en tiendas para mascotas qué tipo de fundas de coche para perros puedes utilizar con el fin de mantener limpios tus asientos

Protege el interior de tu auto con una manta o protector especial para perros, que están hechos con materiales resistentes, pueden lavarse, son fáciles de poner y quitar, suaves al tacto, impermeables y antideslizantes lo que permite que las mascotas se sientan cómodas.

Que viaje suelto

Si tu perro es grande y tu vehículo lo permite, instala en la parte trasera un separador de red resistente o rejilla metálica, ideal para dividir la zona posterior de la de los pasajeros, evitando que tu mascota pase a los asientos delanteros del auto.

Esta opción proporciona mayor libertad de movimiento a tu perro, pero debes saber que no cubriría su seguridad al 100% en caso de colisión.

Independiente de cuál elijas, se recomienda que lo combines con el uso de una jaula de transporte adecuada al tamaño de tu perro. Ésta deberá ir colocada en el maletero, en posición transversal a la marcha.

Viajar con mascotas en avión

Si viajas en avión, contacta con la compañía aérea para que te informe sobre la documentación necesaria y las características del trayecto. Generalmente, los perros se ubican en la bodega, que es el lugar destinado a los animales.

Al llegar al sitio elegido

Al llegar al sitio de vacaciones, es importante que tu perro se familiarice con el espacio. Déjalo oler y explorar la habitación y los alrededores. Busca un lugar para ubicar su cama, su tazón de comida y de agua, y dale alguno de sus juguetes para que se sienta como en casa. 

Durante el primer día, procura que esté tranquilo, así podrá acostumbrarse poco a poco al nuevo espacio. En pocas horas, su curiosidad lo llevará a salir y explorar el entorno. 

Por ejemplo, para muchos perros, la experiencia de ir a la playa junto a sus tutores suele ser única en cualquier época de año. Pensando en eso, te damos una guía imprescindible para que tu mascota disfrute con seguridad. 

Ir a la playa con perros

Es importante que, antes de ir con tu perro a una playa, te informes de su ubicación, características, si permiten que estés con él y si tienen zonas de descanso y regaderas.

Además, analiza el temperamento de tu perro y su reacción el primer día que visiten la playa. Por lo espaciosa, tu mascota la puede ver como un lugar incómodo. Si así fuera, puedes optar por otros planes en los que tu amigo de cuatro patas se sienta más seguro.

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Otra opción es que tu perro aproveche para hacer ejercicio y correr, sobre todo si no es una raza con agrado al agua. También es posible que, debido al calor y a la presencia de otros perros en la playa, sus ganas de darse un chapuzón y socializar aumenten.

En ese y en todo momento, es indispensable que tu perro lleve su collar y su placa, para así ahorrarte tiempo y disgustos. Si llegara a perderse o escapar del lugar de vacaciones, la persona que lo encuentre te lo devolvería.

Recuerda que siempre debes estar en contacto con tu veterinario de confianza, pues este profesional es quien cuenta con el conocimiento y experiencia necesarios para verificar que todo lo que tiene que ver con tu compañero va a ser en su beneficio. Con PURINA® dale lo mejor a tu amigo de cuatro patas, porque tu mascota es nuestra pasión.